Cada año, los parques nacionales de Francia atraen a unos 9 millones de visitantes y cubren aproximadamente el 10% del territorio del país, desempeñando un papel crucial en la representación de la identidad francesa. Estos 11 parques nacionales, espacios emblemáticos franceses y europeos, que varían desde los Pirineos hasta los Alpes, y se extienden hasta regiones tan distantes como Guyana y Guadalupe, son considerados entre los más hermosos del mundo. Estos «monumentos naturales» albergan una biodiversidad impresionante y están reconocidos por su excepcionalidad a nivel global, abarcando una amplia gama de ecosistemas tanto marítimos como terrestres.
Unificados por el objetivo común de minimizar el impacto humano en el medio ambiente, promover prácticas sostenibles y proteger tanto la biodiversidad como el esplendor natural del área, estos parques nacionales operan bajo normativas que promueven un enfoque de desarrollo sostenible. Ofrecen un espacio de libertad, accesible a todos, donde es posible disfrutar de actividades favoritas como el senderismo, la natación, el buceo, el parapente y los deportes de invierno, todo dentro de un marco de respeto por el entorno natural. Estos parques invitan a una aventura en la naturaleza, donde la belleza del paisaje y la riqueza ecológica se encuentran protegidas y valoradas.